"Sólo cuando el barco salió de la orilla y vio que estaba lleno de mujeres y niñas que se asustó y empezó a luchar. Sin embargo, todavía no tenía idea de lo que pasaba: estaba aterrorizada. Fue golpeada y perdió el conocimiento. Cuando despertó, estaba en Italia y, después de un viaje de siete días, se encontró en un apartamento en los suburbios de Turín. Se enteró de que había sido objeto de trata, y que era vendida como prostituta en una red de proxenetas italianos y albaneses. "Si usted quiere comer, tiene que trabajar ", dijo uno de ellos."
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